Ofuscar(se)
No sé exactamente qué fue lo que pasó, ni como llegué a esta situación.
No se realmente que pensar, que decir, ni mucho menos como actuar. Es algo tan insensato.
Absolutamente todas y cada una de las fichas y los pasos que daba me marcaban que no era el camino correcto, y no lo es... Pero eso no me detuvo.
Sabía a lo que me enfrentaba, o por lo menos eso creía. Al comienzo todo marchaba bien, no había de que preoupárse. Pero después... Después... Algo ocurrió. Algo enigmático. No tiene un motivo, una razón, un por qué, o como prefieran llamarlo. Y cuando quise darme cuenta, mi mundo se vino abajo. Me sentí frágil, vulnerable, débil... Me sentí vacía. Como si dentro mío no hubiese nada, sólo un par órganos que actúan por cuenta propia sin necesitar el poder de mi decisión.
Voy a dar un ejemplo, como para poder entender un poco mejor esta situación muy poco deseada.
Elijan a una persona, y que esa persona sea alguien a la cual quieran, que ese alguien sea el que más seguro los hacen sentir en el mundo. Bien, luego imaginen que se van de vacaciones con "ese alguien". Se van a... ¿Un bosque? Si, a un bosque. Donde hay un sol radiante, un lindo lago, una cabaña muy acogedora, los pájaros cantan, y los patitos nadan en el lago. Todo es completo y absolutamente maravilloso, no existe nada más en ese lugar que sólo ustedes dos. Imaginen que están acostados bajo un árbol admirando la belleza que les ofrece el lugar, el momento es tan gratificante que eso los lleva a cerrar los ojos y permanecer así por unos segundos. Y luego, cuando los abren miran a su alrededor y no hay nada ni nadie, están sólos y desorientados. Sólo hay un lago vacío, una inmensa neblina que no deja ver por donde vas, varios árboles y el ruido de las hojas que el viento provoca. Se levantan y salen a buscar desesperadamente algo... " Algo" que no saben que es, pero que absurdamente necesitan.
No se realmente que pensar, que decir, ni mucho menos como actuar. Es algo tan insensato.
Absolutamente todas y cada una de las fichas y los pasos que daba me marcaban que no era el camino correcto, y no lo es... Pero eso no me detuvo.
Sabía a lo que me enfrentaba, o por lo menos eso creía. Al comienzo todo marchaba bien, no había de que preoupárse. Pero después... Después... Algo ocurrió. Algo enigmático. No tiene un motivo, una razón, un por qué, o como prefieran llamarlo. Y cuando quise darme cuenta, mi mundo se vino abajo. Me sentí frágil, vulnerable, débil... Me sentí vacía. Como si dentro mío no hubiese nada, sólo un par órganos que actúan por cuenta propia sin necesitar el poder de mi decisión.
Voy a dar un ejemplo, como para poder entender un poco mejor esta situación muy poco deseada.
Elijan a una persona, y que esa persona sea alguien a la cual quieran, que ese alguien sea el que más seguro los hacen sentir en el mundo. Bien, luego imaginen que se van de vacaciones con "ese alguien". Se van a... ¿Un bosque? Si, a un bosque. Donde hay un sol radiante, un lindo lago, una cabaña muy acogedora, los pájaros cantan, y los patitos nadan en el lago. Todo es completo y absolutamente maravilloso, no existe nada más en ese lugar que sólo ustedes dos. Imaginen que están acostados bajo un árbol admirando la belleza que les ofrece el lugar, el momento es tan gratificante que eso los lleva a cerrar los ojos y permanecer así por unos segundos. Y luego, cuando los abren miran a su alrededor y no hay nada ni nadie, están sólos y desorientados. Sólo hay un lago vacío, una inmensa neblina que no deja ver por donde vas, varios árboles y el ruido de las hojas que el viento provoca. Se levantan y salen a buscar desesperadamente algo... " Algo" que no saben que es, pero que absurdamente necesitan.
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